13 marzo 2025

Manuel Diosleguarde deja su huella en Arnedo

TONI SÁNCHEZ

Con la ilusión y ambición de sumar un triunfo más a su dilatada nómina de éxitos en las plazas de España y Francia. Así llegaba a Arnedo el novillero salmantino Manuel Diosleguarde, a quien acompañamos las veinticuatro horas previas a su comparecencia en la plaza de toros riojana para disputar la final del Zapato de Plata.

De mirada serena y noble, Diosleguarde afronta este importante compromiso con la tranquilidad de quien se sabe preparado para grandes retos gracias al duro y exhaustivo entrenamiento durante el invierno. Las casualidades no existen para quien pone toda la carne en el asador tarde tras tarde en busca de la gloria, de ese triunfo que le mantenga en boca de todos los aficionados a escasos meses de debutar con picadores en la plaza de toros de Ledesma. 

Diosleguarde, alumno de la Escuela de Tauromaquia de la Diputación de Salamanca, y apoderado por José Ignacio Cascón, nos permite vivir y compartir con él esas horas previas repletas de miedos, responsabilidad, impaciencia, motivación y ansias de triunfo. El espigado torero charro cosechó esa tarde un éxito más a su trayectoria, siendo el único novillero en sentir el calor del público y saborear la gloria sobre la arena de la plaza de toros de Arnedo.