Cristina Klimowitz: ‘Queremos concienciar de cómo reconocer una agresión sexual y sobre todo cómo actuar ante ella’

PAULA ZORITA

Las agresiones sexuales y la violencia de género sigue siendo un problema al que hay que hacer frente de manera radical. Desde el Ayuntamiento de Salamanca se lleva trabajando sobre ello desde la Comisión de Violencia de Género durante mucho tiempo, y este año, durante el periodo de Ferias y Fiestas se va a reforzar aun más si cabe para concienciar a la ciudadanía de esta lacra social.

En el seno de la comisión de Violencia de Género se estableció hace ya tiempo una programación anual para incidir con información sobre esta problemática en todos aquellos eventos que congregasen a un número elevado de personas y en años anteriores ya se ha estado trabajando con el lema ‘Violencia cero’ y ‘Disfruta de unas fiestas en igualdad’.

Cristina Klimowitz, concejal de Familia e Igualdad de Oportunidades, nos explica a unas horas del comienzo de las Ferias y Fiestas, cuáles son las nuevas consignas que el Consistorio ha marcado para combatir durante estos días las agresiones sexuales o la violencia de género. Se van a repartir más de 30.000 octavillas en distintos puntos de la ciudad como Plaza mayor, Aldehuela, Plaza de Anaya… todos aquellos lugares donde hay gran confluencia de gente durante estas fechas.

‘Este año, -explica Klimowitz-, también queremos ampliar la información a los locales donde haya una gran confluencia de gente joven, también en mupis y elaborando un catálogo respecto a las agresiones sexuales’. También, según afirma la concejala, ‘como novedad, y después de reunirnos de nuevo el grupo de trabajo de violencia de género, a lo largo de todas las Ferias y Fiestas desde hoy mismo y hasta el día 16 (día de la carrera contra la violencia de género), se han elaborado unas octavillas con una información muy precisa, clara y rotunda respecto a cómo reconocer una supuesta agresión sexual, cómo responder a esa supuesta agresión y a cómo actuar’.

‘El mensaje está dirigido tanto a la víctima de la agresión, -prosigue Cristina-, como a su entorno más inmediato o las personas que la acompañan porque en muchos casos es verdad que esa mujer no está sola. A las personas hay que concienciarlas para que no miren hacia otro lado y cuando vean una situación complicada o una agresión a una mujer no se escabullan porque esto es un problema de todos’.