3 abril 2025

Ana Isabel González Tamborino: ‘En Dublín te abren puertas y puedes ascender aunque no sea el trabajo de tu vida’

PAULA ZORITA

Hace unos meses que Ana Isabel González Tamborino ha abandonado su ciudad natal, Salamanca, para probar suerte en Dublín. En su caso no hizo falta mucho tiempo desde que terminó la carrera de Magisterio de Educación Infantil (este mismo año) para decidirse a dejar nuestro país y seguir formándose en el extranjero. Echa de menos el modo de vida de España, pero esta aventura le está aportando mayor visión y la posibilidad de entender que el estilo de vida de aquí no es ni mejor ni peor que el de Dublín u otro lugar. Se muestra positiva tras su difícil decisión y, aunque reconoce que lo que más cuesta es dejar el ‘círculo más cercano de amigos y familia’, reconoce haber tenido ‘suerte’ con la gente que ha conocido allí. Queremos conocer la historia de esta salmantina que lleva el nombre de nuestra ciudad en este caso hasta Dublín

SBN: Ana Isabel, estudiaste Magisterio de Educación Infantil… Cuéntame, ¿por qué elegiste esa carrera?

AIG: Sí, he estudiado Magisterio de Educación Infantil con la mención de audición y lenguaje. Siempre he tenido claro que me gusta tratar con niños y niñas y que me interesaba la psicología, sociología y en general la educación, por lo que consideré que podía juntar todos esos aspectos en esta profesión.

SBN: Terminaste en junio de este año… ¿Qué te hace tomar la decisión de irte a Dublín?

AIG: Como bien se sabe, para acceder a la docencia pública en España tienes que pasar por las oposiciones; yo no podía presentarme hasta las siguientes, por lo que decidí emprender un nuevo camino en el extranjero.

SBN: ¿Por qué tomaste la decisión finalmente?

AIG: Fueron varios motivos los que me llevaron a tomar esta decisión, considero que están ligados. El principal motivo era aprender inglés, lo que me iba a permitir crecer personal y profesionalmente. Actualmente estoy trabajando como ‘au pair’ (vives con una familia que te proporciona una habitación, comida y un dinero semanal a cambio de cuidar de sus hijos y/o hijas). Contacté con la familia desde España a través de una página web.

SBN: Imagino que tomar esa decisión fue dificil, ¿o en tu caso no?

AIG: Es una decisión difícil porque dejas en «España» muchas cosas; familia, amigos… y das un cambio radical en tu vida. Pero considero que una decisión así, aunque los principios siempre sean difíciles, a la larga todo lo que te va a aportar a tu vida son cosas positivas.

SBN: ¿Qué es lo que más te costó dejar atrás, aquí en Salamanca? ¿Cuánto tiempo llevas allí?

AIG: A mí entorno más cercano, las personas con las que compartía mi día a día. Llevo dos meses en Dublín.

SBN: ¿Cuál es el primer recuerdo que tienes recién llegada? ¿La primera persona que conociste?

AIG: Por suerte, cuando llegué al aeropuerto la madre de mi familia de acogida iba a recogerme. Fue la primera persona que vi y todo lo que me transmitió fue positivo, a pesar de que apenas nos entendíamos (el acento irlandés es muy difícil jajaja)

SBN: ¿Quién es ahora mismo tu principal apoyo allí?

AIG: La mayor parte del tiempo entre diario la paso con mi familia de acogida, he de reconocer que he tenido mucha suerte con ellos. Si decides vivir la experiencia de irte al extranjero como ‘au pair’ lo principal y mejor para ti es que tengas suerte con la familia que escoges, en mi caso así ha sido. En mi tiempo libre suelo estar con gente que he conocido de diferentes países y como todos estamos más o menos en la misma situación nos lo hacemos fácil los unos a los otros y nos ayudamos en lo que podemos.

SBN: ¿Qué es lo que más y lo que menos te gusta de todo aquello, la cultura es completamente diferente a la nuestra, las aficiones también, la forma de vida en definitiva es muy distinta…?

AIG: Yo pensaba que no iba a notar tanta diferencia, pero si que la hay. Supongo que todo está dentro de la cultura, todo es diferente desde que comienzan el día, los horarios de las comidas, la hora de irse a dormir… Entre diario a partir de las 6 de la tarde se acaba el día para ellos prácticamente. Suelen empezar a comer a las 12.30 del mediodía y cenar a las 17.30 aproximadamente; sin olvidar que para ellos la comida más importante es la cena y en el «lunch» sólo comen cosas ligeras (al contrario que en España), sin duda eso es lo que peor llevo.

SBN: ¿Cuál es la principal diferencia que encuentras entre el país donde te encuentras y nuestro país?

AIG: El horario y el estilo de vida, sin duda alguna…

SBN: ¿Tienes unas mayores metas laborales u objetivos a largo plazo? Es decir, ¿te ves en aquel país por mucho más tiempo o te gustaría volver en algún momento?

AIG: Claro que me gustaría volver, pero no sabría decir cuando. Mi experiencia ha comenzado como au pair, te abre muchas puertas. Pero no descarto en un futuro comenzar a trabajar en algo relacionado con la educación ya que me proporcionará más independencia en todos los sentidos.

SBN: ¿Qué te impactó de aquella ciudad, algo que tú recuerdes y que marcase un día o un momento para ti?

AIG: Me imaginaba Dublín más grande de lo que es, al final en el centro está todo cerca y puedes moverte andando. Me encanta el ambiente que hay, no encontrarás muchos monumentos pero siempre es agradable pasear por sus calles.

SBN: ¿Cuál es tu sueño?

AIG: Tengo varios jajaja, no podría escoger uno. Supongo que ser feliz haga lo que haga.

SBN: ¿Qué es lo que más echas de menos de Salamanca?

AIG: Cómo decía el centro de Dublín es pequeño, pero la gente no suele vivir en el centro. Echo de menos eso de Salamanca, que aunque vivas a las afueras puedes moverte con facilidad sin depender del transporte público.

SBN: Una vez fuera, y emprendiendo una vida laboral… ¿qué carencias le ves a nuestra ciudad y qué oportunidades o cosas valoras de ella?

AIG: Al salir de tu país te das cuenta de que no se trata de carencias y/o oportunidades en un sitio u otro, sino de estilos y formas de vida diferente. Cuando sales de tu lugar de origen tienes que romper con los esquemas convencionales donde has sido criado y aprender a valorar y a entender a la sociedad en la que estás en ese momento; valorando también los anteriores, por supuesto. No es comparable, lo que para mí es una carencia para ellos puede ser su modo de vida, ni peor, ni mejor.

Aún así, lo que más echo de menos es la comida ya que es muy diferente y el transporte público, aquí es malÍsimo. Y por supuesto el clima, pero ya sabía a lo que me exponía jajaja. En cuanto a carencias en España, la escasez de oportunidades laborales a los jóvenes, aunque eso ya se sabe.., aquí en cierta medida te ayudan a mejorar y evolucionar y te abren las puertas a pesar de desconocer el idioma. No será el trabajo de tu vida, pero siempre puedes ascender.

SBN: ¡Muchas gracias, Ana Isabel! Que tengas suerte en todo lo que hagas…

AIG: ¡Gracias a vosotros por dejarme contar mi experiencia!