
Un buen Domingo de Ramos que se precie tiene la presencia del sol, y hoy después de muchos días sin él, parece que el tiempo ha dado una tregua y hemos podido disfrutar de ‘La Borriquita’ de la mejor manera. La gente en las calles, estrenando, como manda la tradición y los niños procesionando felices delante del paso que da el pistoletazo real a la Semana Santa, último día de Cuaresma.
Hoy es día de júbilo, puesto que este paso representa la entrada de Jesús a Jerusalén montado sobre un asno y fue aclamado como rey por sus seguidores, quienes extendieron mantos, ramas de olivo y de palma a su paso. Gritaban: “¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!”; “¡Hosanna en las alturas!». Los niños salmantinos también han celebrado la llegada del Mesías con la mayor alegría y la mejor de sus sonrisas, con ansia y esperanza.
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